HIFU

Por lo general, el tratamiento HIFU está diseñado de manera que los resultados sean los mismos que si se empleara cirugía, pero siempre depende mucho del tipo de piel sobre la que se quiera trabajar, ya que en algunos casos la cirugía es el único recurso para solucionar el problema del paciente.

No es necesario recurrir a pinchazos, lo que evita el malestar que provoca exponer las capas superficiales de la piel, y por otro lado, que son sistemas no invasivos.

Es el único procedimiento no invasivo para tensar y reafirmar la piel sin cirugía. Utilizando un procedimiento de ultrasonidos que lleva siendo empleado en el sector médico durante más de 50 años, es completamente seguro. La energía de estas ondas estimula la producción de elastina y colágeno en las capas profundas de la piel.

Ultherapy  no está destinado única y exclusivamente al rosto, si no que se ocupa de otras áreas que también se ven afectadas por los signos de la edad y no prestamos atención; como en el caso del cuello y el escote.

La piel de todas estas zonas se vuelve más laxa con el paso del tiempo, y podemos apreciarlo en una línea de las cejas más baja o la piel descolgada debajo de la barbilla. La terapia de ultrasonido tensa y reafirma potenciando la creación de colágeno. Además esta tecnología incorpora un scanner que permite el visionado en tiempo real de la aplicación del tratamiento. Así podremos ver las diferentes capas de tejidos y cual necesita más atención desde un principio.

Al contrario que el láser o la radiofrecuencia que actúan desde fuera, HIFU  trabaja desde el interior de la piel evitando el contacto con la superficie que suele interpretarse como agresión. El radio de actuación focalizado es de 4,5mm que es la misma capa dérmica que se alcanza con cirugía pero, sin embargo, no se requiere largos periodos de recuperación.