Cómo eliminar las manchas solares

El verano es la estación en la que más expuestos estamos al sol. Y eso puede dejarnos un color agradable en la piel como recuerdo de nuestras vacaciones, y en muchas ocasiones, quizás más de las que deseamos, las molestas manchas solares. Utilizar protección solar es un paso indispensable cada vez que vamos a estar al aire libre, pero, aun así, si no reaplicamos o no usamos una crema adecuada, puede que no logremos prevenir su aparición. Pero no desesperes: estas imperfecciones tienen solución. A continuación, vamos a ver por qué se manifiestan y qué tratamientos son los más eficaces para olvidarnos de ellas.

¿Cómo se producen las manchas solares?

Las manchas solares en la piel son uno de los principales signos que envejecen nuestras facciones. El motivo no es otro que la falta de homogeneidad en el tono del rostro, pero, además, provoca que el cutis tenga un aspecto más opaco y falto de luminosidad. La hiperpigmentación comienza a darse especialmente a partir de los 30 años, y con mayor probabilidad si no se ha usado una protección solar apropiada a lo largo de los años.

La responsable de que se produzcan las manchas no es otra que la radiación ultravioleta, aunque hay otros factores que pueden desempeñar un papel y que pueden ser algo más difíciles de controlar, como lo son la genética, la edad o las hormonas. También hay ciertos medicamentos, conocidos como fotosensibilizantes, que hacen que la piel reaccione y se muestre más sensible a las radiaciones, por lo que puede favorecer la formación de manchas solares.

¿En qué capa se forman las manchas solares?

La melanina, situada en la epidermis, es la capa más superficial de la piel y es la encargada del color de nuestro cutis, ojos y pelo. Además, desempeña una función primordial en nuestro cuerpo: protege a la dermis de los efectos nocivos de la radiación ultravioleta. Para ello, cuando nos exponemos al sol, los melanocitos, las células responsables de la producción de melanina, se ponen a trabajar para generar su síntesis y evitar que la dermis se queme y se dañe por los radicales libres.

La exposición solar prolongada puede dar lugar a un exceso de melanina, algo que ocurre cuando los melanocitos se desequilibran, crean más melanina de la necesaria y esta, además, no se distribuye de manera igual por toda la piel. El resultado evidente son las manchas solares que, por desgracia, se hacen más visibles tras la temporada estival. Son habituales en las zonas del cuerpo que están más expuestas, como la cara, pero también las manos, el cuello y el escote, y suelen acomodarse en la capa superficial de la dermis. El color característico es el marrón, pero puede variar en tonalidad, desde el más claro al más oscuro.

Manchas por el sol: posibles tratamientos

Por suerte, la medicina estética ofrece multitud de soluciones en la actualidad para eliminar las manchas solares. Un procedimiento clave para recobrar la luminosidad y la homogeneidad en el tono del rostro es el peeling facial. Una vez se ha valorado la piel del paciente es posible personalizar al 100 % el protocolo a seguir y los componentes a usar. Todo dependerá del nivel de exfoliación que se necesite para obtener los mejores resultados según la sensibilidad y las características de la dermis. Los peelings químicos consiguen eliminar la capa cutánea más superficial para que esta se regenere y dé lugar a una nueva libre de imperfecciones y manchas. Es un tratamiento completamente indoloro y eficaz.

Otras opciones son el láser o también la Luz Pulsada Intensa (IPL). Estas tecnologías comparten el mismo objetivo de la exfoliación. La diferencia radica en un mayor control por parte del profesional, ya que se aplica directamente sobre las zonas concretas y la luz capta el color más oscuro provocado por la melanina y actúa solo sobre ella sin dañar el resto de los tejidos. Estos tratamientos tienen un extra y es que estimulan la producción de colágeno y elastina.

Por último, el Dermapen o el DermaRoller son dos dispositivos que permiten poner en práctica la técnica del microneedling. Consiste en la aplicación de microagujas sobre la piel. Es un procedimiento indoloro que sirve para crear microlesiones controladas, imperceptibles por el ojo, para propiciar el proceso de regeneración natural de la piel. En consecuencia, se origina una nueva piel, de nuevo, libre de marcas e imperfecciones.

Si quieres ponerle remedio a las manchas solares, es importante que acudas siempre a profesionales especializados que garanticen tu bienestar. En Eternal Beauty Clinic tienes un equipo a tu disposición que te asesorará de manera personalizada en todo momento.